Ojos que cambian sus tonalidades en correspondencia con la claridad del día y donde las emociones provocan la aparición de fértiles manantiales, caracterizan a esta mujer consagrada a la formación de niños, adolescentes y jóvenes.
La simpatía por los idiomas extranjeros encontró un idóneo espacio en el sector educacional, para como excelente profesora inspirar con el ejemplo y convertirse en guía de aventajados discípulos, entre ellos su hija mayor, actualmente compañera de labores del Departamento de Humanidades del Centro Mixto Doña Emilia González Echemendía.
Aunque el nombre de esta destacada educadora que inspiró escribir la presente crónica es Odalis Vera Ramos, desde pequeña todos la llaman Lila, lo que nos da la posibilidad de descubir en ella ciertas semejanzas con el peculiar arbusto que aporta olorosas flores de color morado claro.
Profesora de inglés en secundaria básica, metodóloga municipal de la asignatura, colaboradora del Instituto de Perfeccionamiento Educacional y directora del Curso Integral para Jóvenes, son algunas de las experiencias presentes en el voluminoso currículum de Lila, quien entre sus obligaciones tiene la de impartir clases a un grupo de alumnos de duodécimo grado.
Este 2020 constituye un año de celebraciones en el entorno familiar de la majagüense Odalis Vera Ramos, pues además de cumplir las cuatro décadas de fructífera actividad docente, la fecha coincide con su condición de esposa del también educador Rogelio García Díaz.
Cuarenta años de unión matrimonial, o bodas de rubí, testigos de un amor que según aseguran sus propios protagonistas, no entró por la cocina, pero ha sido capaz de aportar esa felicidad que repercute en sus descendientes, hijas y nietos premiados con la luz del más claro día y la ternura de olorosas flores.